El pasado viernes por la noche, 20 de julio 2018, estuve hablando de una pieza de la artista cubana Tania Bruguera en el Centre Pompidou Málaga. Me pidieron que hablara de alguna de las obras que hay en el museo y elegí, sin dudar, un vídeo de Tania Bruguera, ¡País mío, tan joven, no sabes dirigir!, extracto nº 5 de La isla en peso (2001).
Esta pieza formaba parte de una video instalación que realizó la artista en 2001. La primera exposición individual en Estados Unidos, que tuvo lugar en una pequeña galería ubicada en un segundo piso en Chelsea (Nueva York). La artista explora en este trabajo temas como el exilio, el desarraigo, el aguante y la supervivencia. Pero sobre todo desde mi punto de vista trata sobre la valentía.
Esta pieza formaba parte de una video instalación que realizó la artista en 2001. La primera exposición individual en Estados Unidos, que tuvo lugar en una pequeña galería ubicada en un segundo piso en Chelsea (Nueva York). La artista explora en este trabajo temas como el exilio, el desarraigo, el aguante y la supervivencia. Pero sobre todo desde mi punto de vista trata sobre la valentía.
Los días previos estuve buceando en su trabajo. Obviamente conocía su obra, pero nunca me había detenido en ella con tanto detenimiento. Esta exploración me dejó huella, tanta que he decidido tomarme una pausa y replantearme ciertas cosas.
La artista emplea el término arte de conducta para definir su trabajo, no le gusta el termino performance, además de ser un anglicismo, porque está muy ligado al teatro. Ahí coincidimos bastante, yo prefiero el término acción o arte de acción, frente al de performance.
El arte de Conducta tiene sus raíces en el arte conceptual y la performance, pero en lugar de enfocarse en los límites del lenguaje y del cuerpo físico explora los límites del cuerpo social. Trabaja con la reacción y la conducta que crea en los que presencian y participan en la obra, dando origen a un proceso donde el público se transforma en ciudadano. Un arte útil que pueda influir verdaderamente. Tania Bruguera trabaja diversas maneras en las cuales el arte puede ser aplicado a la vida política cotidiana; no sólo como un dispositivo para la auto-reflexión sino como vías para generar e instalar modelos de interacciones sociales.
Me conmovió su grado de responsabilidad y su fuerte compromiso. Y considero un trabajo sublime Autosabotaje (2009). Conferencia-performance que se realiza en el Jeu de Paume en Paris como parte de la serie "Culture as a strategy to survive," el 6 de marzo del 2009 y después en el Pabellón de la Urgencia en la 53 edición de la Bienal de Venecia de ese mismo año. Los artistas que trabajan temas políticos deben llevar las cosas hasta sus últimas consecuencia, no vale con representar algo, hay que empezar por uno mismo, dejar de sentir miedo y "autosaboterase" si es preciso.