Cambio de aires una temporada. Tras cuatro años geniales trabajando en la UMA, me cambio por un tiempo a la UCO.
Una pequeña aventura que me permitirá descubrir una bella ciudad con calma, vivirla, respirarla, sentirla. Odio ver las ciudades como turista, me gusta pasear sin rumbo, sin plazos, sin visitas obligadas. Sin tener que ver o hacer nada concreto.
Espero que Córdoba, cuajada de cultura, me inspire nuevos proyectos, me susurre ideas. Todo suma y alimenta mi alma. Estoy deseoso de encontrar esa cafetería o terraza en el casco antiguo de Córdoba que me invite a escribir en mi cuaderno mis próximos pasos.
Todavía no he tenido tiempo de hablar con Maimónides, Averroes o Séneca sobre arte de acción. Seguro que compartimos muchos puntos de vista. La performance da mucho juego.